Blanquísima

Blanquísima colección de pecas,
epifanía sin sol regente,
habría que permutar mis poros* por tus lirios,
restañar mi verso con tu alumbrada risa,
musitar una milonga a tu nariz adornada,
acertar mis señas al excavar tu nombre;
habría que delinear una sutura para desprender mi pecho,
atisbar tu contoneo,
asir tu cintura muselina como racimo,
rozar apenas tu ombligo con un gesto celofán.
tejer tus muslos con el estambre de mi boca;
habría que vernos rodar como una gota
y bordear el signo infinito de tus rodillas,
cubrir tus pies con hojas de jacaranda.

Página escrita en el exilio, te descifro
y aún en la distancia te alcanzo.
Extranjero parpadeo de lino
fosforésceme, elévame, úneme,
desemboca tus ríos en los mares de mi boca.
Hazme aprender que la vida en la tierra
es meramente transitoria, y encántame,
maravíllame.

Comentarios

Entradas populares